Los cardenales se reunieron en ''Oración por la Iglesia''
H. Sergio Mora
La multitud de fieles que se presentó ayer por la tarde para acompañar a los cardenales reunidos en oración en la basílica de San Pedro, obligó a los encargados a cerrar el ingreso al público antes del horario previsto.
La “Oración por la Iglesia” se realizó ante el altar de la Cátedra de San Pedro, sobre el cual se encuentra el famoso vitral en el que una paloma representa el Espíritu Santo. El lugar está situado detrás del altar central, el mismo que tiene el dosel del Bernini y en donde el papa celebra habitualmente la misa.
La ceremonia que duró poco más de una hora está prevista en la constitución apostólicaUniversi Dominici Gregis, la ley de la Iglesia que indica todo sobre el cónclave. El momento de oración inició con el santo rosario, dirigido por el maestro de ceremonias, monseñor Guido Marini, y siguió con la exposición del Santísimo a cargo de los frailes de la sacristía. Presidió las vísperas el arcipreste de la basílica de San Pedro, el cardenal Angelo Comastri que incensó el altar e impartió la bendición con el Santísimo.
Los cardenales estaban en riguroso orden, en el centro de la nave se situaban los seis cardenales del orden de los obispos: el decano, Angelo Sodano; el camarlengo, Tarcisio Bertone; José Saraiva Martins, Giovanni Battista Re, Francis Arinze, y Roger Etchegaray.
Después se encontraban los patriarcas del rito oriental y a continuación los purpurados del orden de los presbíteros y los del orden de los diáconos. Algunos medios de comunicación destacaron la actitud de piedad con el que el cardenal filipino Luis Antonio Tagle, rezó el rosario.
El portavoz del Vaticano, siempre ayer por la tarde, refirió que el papa emérito había apreciado mucho el telegrama que los cardenales le enviaron el martes por la mañana, para expresarle gratitud “por su incansable trabajo en la viña del Señor”.
El portavoz desmintió también las indiscreciones según las cuales en la tarde del 11 de marzo estaría en programa la misa Pro eligendo romano pontefice la cual precede a la apertura del cónclave.
“A propósito de las voces según las cuales los ceremoniarios pontificios habrían reservado la basílica de San Pedro para el lunes próximo, reitero que hasta que no sea decidida la fecha del cónclave no puede ser fijada la fecha de dicha misa”.
Y añadió que sería “singular una misa pro eligendo, fijada en la tarde”. Si bien no excluyó que hayan reservado la basílica para pruebas de la ceremonia.