11/07/14

‘La Iglesia, ni antes, ni durante, ni después del Sínodo puede cambiar la enseñanza de Cristo’

Cardenal Gerhard Müller, Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la fe


El Cardenal habla abiertamente de la influencia nociva sobre el Sínodo y confirma que la enseñanza de la Iglesia sobre la comunión para los “vueltos a casar” civilmente está absolutamente prohibida, por ser contraria al Evangelio. Así mismo, añade, actos homosexuales, contrarios a la naturaleza, son un grave pecado. Y lanza una advertencia: hay “obispos que han sido cegados por la sociedad secularizada”.

Medios de comunicación

Desafortunadamente, en las sociedades modernas, diversos medios, organizaciones internacionales e incluso gobiernos de varios países, están intentando sembrar confusión en la gente. En muchos países, las relaciones están destruidas, y eso se aplica también al modelo cristiano de matrimonio y familia. La verdad sobre el matrimonio y la familia se ha relativizado. Esas tendencias, por desgracia, han entrado en la Iglesia y en los obispos, a los que los medios de comunicación intentan presionar. Nosotros tenemos a Cristo y al Evangelio. Ese es nuestro punto de referencia, el fundamento de la única y adecuada enseñanza de la Iglesia.

Matrimonio

Hay muchos medios, pero sólo un Mediador, Jesucristo y su Evangelio. Por tanto, la palabra de Dios no puede ser ignorada de ninguna manera y no se puede ceder en nada: hay que aceptarla totalmente. La Iglesia, ni antes, ni durante, ni después del Sínodo puede cambiar lo que viene de la enseñanza de Cristo. Respecto al matrimonio, éste se define, sobre todo, por las palabras: «lo que Dios ha unido, no lo separe el hombre».