Benedicto XVI en Tierra Santa
Oportunidad histórica para el diálogo con el Islam
Tanto en el mundo musulmán como en el mundo cristiano, la peregrinación de Benedicto XVI a Tierra Santa despierta expectativas por el impacto que tendrá sobre las relaciones entre el islam y el catolicismo.
En este viaje, el Papa realizará gestos sumamente significativos: por segunda vez en su pontificado entrará en una mezquita, en Ammán; encontrará a los líderes religiosos islámicos en Jerusalén y Belén; visitará la Cúpula de la Roca en la explanada de las mezquitas de la Ciudad Santa, un gesto que no había realizado Juan Pablo II en su visita del año 2000.
El hecho de que la peregrinación comience este viernes por Jordania ayudará sin duda a promover estas cálidas relaciones. El padre Federico Lombardi S.I., director de la Oficina de Información de la Santa Sede, en un encuentro que mantuvo este lunes con los periodistas constató que Su Alteza Abdalá II bin al-Hussein, monarca del Reino Hashemita, ha decidido saltarse el protocolo para mostrar su cercanía al Papa durante la visita al país.
El rey, que acompañado por la reina Rania participó en los funerales de Juan Pablo II, no sólo tiene previsto acoger al Papa en la ceremonia de bienvenida, que tendrá lugar en el aeropuerto internacional Reina Alia de Ammán, a las 14.30 del 8 de mayo, sino que además, con un gesto totalmente inusual, él mismo irá acompañado de la reina a despedir al pontífice el 11 de mayo.
El padre Lombardi recuerda que el rey está dando un fuerte impulso al diálogo entre los creyentes con iniciativas como el Mensaje de Ammán ("Amman Message"), dirigido al mundo musulmán para encontrar un consenso que ponga al margen el extremismo violento, y con el "Mensaje interreligioso de Ammán" ("Amman Interfaith Message"), dirigido en particular al cristianismo y el judaísmo, para promover la paz y los valores compartidos dentro del islam y compartibles con las demás religiones.
El portavoz vaticano recordó que entre los consejeros en este campo del rey destaca el príncipe Ghazi bin Muhammad, coordinador de la iniciativa internacional "A Common Word", el manifiesto de 138 líderes y sabios islámicos (hoy sus signatarios son muchos más), escrito tras los ataques contra Benedicto XVI en su discurso en Ratisbona (12 de septiembre de 2006), que en noviembre pasado contribuyó a crear el Fórum Católico - Musulmán en Roma.
En su esfuerzo por promover las buenas relaciones con los fieles musulmanes, el 9 de mayo, el Papa visitará la mezquita Al-Hussein Bin Talal de Ammán, inaugurada por el mismo rey Abdalá II en el año 2006, y declarada como la "oficial" del país (es también la más grande). Benedicto XVI visitó por primera vez como Papa un lugar sagrado para el Islam al visitar la Mezquita Azul de Estambul, el 30 de noviembre de 2006.
A continuación, el Santo Padre mantendrá un encuentro con los líderes religiosos musulmanes de Jordania, con el Cuerpo diplomático y los rectores de las universidades del país en el patio exterior de esa mezquita, el momento más solemne del viaje a esa monarquía para analizar la cuestión del diálogo interreligioso.
Tras aterrizar en Israel, el segundo día de visita a Jerusalén, el Papa también tendrá gestos inéditos de respeto para los seguidores del profeta Mahoma: en la mañana del 12 de mayo visitará a la Cúpula de la Roca (conocida también como la Mezquita de Omar), en la explanada de las mezquitas, acompañado por el gran muftí de Jerusalén, Muhammad Ahmad Husayn. Los musulmanes consideran que la "roca", que se encuentra en el centro de la mezquita, fue el lugar desde el que Mahoma habría subido al cielo. Para los judíos es también un lugar sagrado, pues formaba era sede del Templo de Salomón. Para los cristianos constituye, además, un recuerdo de las visitas de Jesús al Templo.
El gran muftí Muhammad Ahmad Husayn, sunní, es considerado como la autoridad suprema jurídico-religiosa de Jerusalén y del pueblo árabe-musulmán en Palestina.
Otro momento importante en el diálogo con los musulmanes tendrá lugar con motivo de la visita del Papa a Belén, donde recibirá la bienvenida el 13 de mayo de Abu Mazen, presidente de la Autoridad Nacional Palestina. Tras visitar el Campo de refugiados Aida, en esa localidad, el Papa mantendrá un encuentro con el presidente en el palacio presidencial y conversará con representantes palestinos musulmanes de Gaza y West Bank, invitados por el presidente.