Giovanni Tridente
El cardenal José Tolentino de Mendonça ha apelado a "dialogar con lo nuevo, a trabajar sin descanso en cuestiones y problemas actuales, y a constituirse en grandes laboratorios del futuro"
El Prefecto del Dicasterio para la Cultura y la Educación exhorta a las universidades católicas a la “renovación” con “conciencia”, mirando al mañana con “esperanza”.
Las universidades católicas de hoy y de mañana están llamadas a “dialogar con lo nuevo, a trabajar sin descanso en cuestiones y problemas actuales, y a constituirse en grandes laboratorios del futuro”. Así se expresó esta mañana el cardenal José Tolentino de Mendonça, al abrir los trabajos del coloquio científico organizado por la Alianza Estratégica de Universidades Católicas de Investigación en la sede de la Universidad Católica de Milán.
El discurso del Prefecto del Dicasterio para la Cultura y la Educación pretendía ofrecer una visión general del tema más amplio elegido para el Coloquio, el de la tan debatida “Inteligencia Artificial” y cómo influirá en el desarrollo y las tareas de las Universidades Católicas del futuro.
“Se espera de las universidades católicas no sólo que custodien activamente la noble memoria de los tiempos pasados, sino también que sean sondas y cunas del mañana”, señaló Tolentino dirigiéndose a los presentes, entre los que se encontraban destacados representantes de ocho universidades confesionales de los cinco continentes: Además de la Universidad Católica de Milán, la Australian Catholic University, el Boston College, la Universitat Ramon Llull, la Pontificia Universidad Católica de Chile, la Pontifícia Universidade Católica do Rio de Janeiro, la Sophia University y la Universidade Catolica Portuguesa.
Para el Prefecto del Dicasterio para la Cultura y la Educación, en el contexto actual para los centros educativos de alto nivel es necesario aprender a conjugar “renovación” y concienciación”, términos sobre los que también se ha expresado en varias ocasiones el Papa Francisco.
“No hay duda”, reflexiona Tolentino, “de que el futuro requiere una visión interactiva, una maduración multifacética de la realidad y la audacia de asumir riesgos”.
Para evitar los riesgos inevitables, en cualquier caso, es necesario ‘fortalecer una antropología integral que inscriba a la persona humana en el corazón de los principales procesos de civilización’.
La gran inversión a realizar, en definitiva, “sólo puede ser la humana”, empezando por la educación, a partir de la cual cada persona “pueda desarrollar su potencial cognitivo, creativo, espiritual y ético, y contribuir así, de forma cualificada, al bien común”.
Otro aspecto subrayado por el Cardenal es el de tender a una “inteligencia creativa”, acompañada de un “discernimiento que no puede ser parcial, ni improvisado, sino sólidamente fundado en los propios valores”.
Por último, retomando de nuevo el Magisterio del Papa Francisco, es necesario mirar al futuro con “esperanza”: “cuando falta la esperanza, falta la vida. Quien vive en el mundo universitario no puede permitirse no tener esperanza. La esperanza es nuestra misión”.
Al Coloquio que se celebra en Milán asisten los rectores de las ocho universidades que participan en la Alianza SACRU.
Al término del evento, se elaborará un documento preliminar para la publicación de un documento de posición en el que se esbozará una visión compartida sobre el impacto de la inteligencia artificial y el papel de las universidades, especialmente las católicas. Las conclusiones se confiarán al presidente y al secretario general de Sacru.
Fuente: omnesmag.com