El misterio de la llamada de Dios
La vocación al sacerdocio, en el centro de las reflexiones
Mañana sábado concluirán, con la celebración de los Laudes y una última meditación, los Ejercicios Espirituales predicados al Papa y a la Curia Romana por el salesiano Enrico Dal Covolo, y que este año se han centrado en el tema de la vocación sacerdotal.
“Una vez más, el Pontífice da ejemplo a los fieles sobre la actitud que se debe tener en este tiempo particular de oración, de reflexión, y de conversión”, subraya David Gutiérrez, director de la programación en español de Radio Vaticano, y encargado de comentar los Ejercicios de este año.
Gutiérrez subraya la “profunda vivencia” de estos Ejercicios por parte del Papa, durante toda la semana.
Como explicó el mismo Dal Covolo en una entrevista a ZENIT, cada uno de los días de la semana ha constituido un marco específico desde el que mirar esta vocación al sacerdocio, en línea con el Año Sacerdotal convocado por Benedicto XVI.
Así, el lunes fue una jornada de “escucha”, centrada en la Lectio divina de un pasaje bíblico muy conocido como paradigma de llamada vocacional, la de Dios al profeta Samuel (1 Re, 19, 1-21).
El predicador propuso varias figuras bíblicas y de los Padres de la Iglesia sobre esta actitud de escucha a la llamada divina, y especialmente, el modelo de san Agustín, un santo muy querido al Papa Benedicto XVI.
El martes se dedicó a reflexionar sobre la respuesta del hombre a la llamada divina. Según comenta Gutiérrez, ese día “Enrico dal Covolo, centró sus reflexiones de hoy en la respuesta que da el hombre a ese llamado de Dios, revisando algunas historias bíblicas, especialmente la referida en el evangelio según san Mateo donde Jesús habla sobre construir sobre la arena de nuestros intereses o construir sobre la Roca de Dios”.
“Un énfasis fuerte fue hecho en el sentido que la vocación y la respuesta son para la misión. Este segundo día concluyó con una reflexión sobre el ejemplo sacerdotal del Santo Cura de Ars”.
El miércoles se dedicó a la penitencia, y según explica el comentarista de Radio Vaticano, el propósito fue reflexionar, después de hacerlo sobre la llamada divina y sobre la respuesta del hombre, sobre “los aspectos humanos que están involucrados en ese proceso, especialmente los referidos a lo que podemos llamar las resistencias que presenta el ser humano ante la voluntad de Dios que le llama”.
“Las tentaciones, las dudas, las resistencias forman parte de nuestra historia, lo que genera la conciencia de que siempre somos pecadores, pero también invitan a una apertura a la gracia del Dios que siempre nos perdona. Es la actitud permanente de conversión que la Iglesia pide a sus fieles en este tiempo de Cuaresma, y que el Papa con sus ejercicios espirituales está viviendo en forma profunda”, explica.
El jueves, siguiendo la tradición de la Iglesia de consagrar este día al culto eucarístico y a la veneración del sacerdocio ministerial, fue un día “cristológico”, es decir, dedicado a la reflexión sobre la persona de Jesucristo, y se dedicó a profundizar en la llamada a los primeros discípulos.
“Tanto la lectio divina como las meditaciones de la mañana han seguido este texto para comprender el papel de Jesús en la vida de cada llamado, de cada sacerdote”, explica el responsable de la programación española de Radio Vaticano.
La figura sacerdotal presentada este día por Dal Covolo fue la del salesiano italiano Giuseppe Quadri, cuya vida sacerdotal fue un ejemplo por la humildad y sencillez.
“Su lema era 'trataré de hacerme santo'. Este lema es el mensaje que ha dejado el predicador de los ejercicios del Papa, que todos se hagan santos en el ejercicio de su ministerio sacerdotal”, subraya Gutiérrez.
Hoy viernes, la meditación se ha centrado sobre la Virgen María, modelo de respuesta a la llamada divina. Como explica el padre Gutiérrez, “el Santo Padre y sus colaboradores han meditado, siguiendo los textos del Magnificat y la anunciación, ambos tomados del evangelio según san Lucas, sobre la figura de nuestra madre celestial, viendo en ella el ejemplo de la confirmación de Dios cuando hace un llamado a alguno de sus hijos”.
“El predicador presentó hoy a la reflexión la figura del papa Juan Pablo II, una persona que vivió su ministerio sacerdotal, episcopal y petrino siempre confiando en la Virgen”, explica.