La formación litúrgica, esencial en la vida de la Iglesia
XXXV Jornadas de la Asociación Española de Profesores de Liturgia
Durante los días 31 de agosto al 2 de septiembre, la Asociación Española de Profesores de Liturgia (AEPL) celebró sus Jornadas anuales en El Escorial (Madrid).
Los asistentes se dieron cita en el Real Centro Universitario Escorial-María Cristina. Este año el tema a estudiar era "La formación litúrgica".
Partieron los participantes de lo que dice el Concilio Vaticano II en su Constitución "Sacrosanctum Concilium" (n. 15-19), respecto de los profesores que se eligen para enseñar la asignatura de Sagrada Liturgia en los seminarios, casas de estudios de los religiosos y facultades teológicas.
Explica cómo la asignatura de Sagrada Liturgia se debe considerar entre las materias necesarias y más importantes. En los seminarios y casas de formación, los clérigos deben adquirir una formación litúrgica de la vida espiritual. A los sacerdotes, tanto seculares como religiosos, se les debe ayudar con todos los medios apropiados a comprender cada vez más plenamente lo que realizan en las funciones sagradas, a vivir la vida litúrgica y comunicarla a los fieles a ellos encomendados. Todo ello para fomentar con diligencia y paciencia la educación litúrgica y la participación activa de los fieles, interna y externa.
Para todo ello, contaron con la ciencia y la experiencia de un nutrido grupo de especialistas, quienes les fueron introduciendo "en este apasionante mundo de la formación litúrgica".
Con el tema "La formación litúrgica desde Trento al Vaticano II", el profesor Ramiro González Cougil fue dibujando el panorama litúrgico en los distintos documentos emanados durante esas épocas.
El profesor, José Luis Gutiérrez Martín, centró su estudio en "Acentos de la formación litúrgica actual", donde una vez más los participantes vieron "que una liturgia bien celebrada, sincera y conforme a su naturaleza es ya formativa, ya que nos ayuda a comprender la realidad sensible", afirma Roberto Gutiérrez.
El padre Gabriel Seguí Trobat en su comunicación presentó "con un lenguaje claro y contundente" el caminar de la asignatura y de lo estudios litúrgicos en el Plan Bolonia.
Monseñor Demetrio Fernández González, obispo de Córdoba, en su ponencia sobre "La formación y la vida litúrgica de los sacerdotes", habló de la necesidad de una formación permanente litúrgica, sana y profunda, un conocimiento y vivencia personal que haga de la liturgia la fuente principal de la vida del sacerdote.
El salesiano Luis Fernando Álvarez González presentó "La liturgia en los centros de Estudios Eclesiásticos". Trató sobre la necesidad de una renovación del método teológico y sobre el perfil de los alumnos de los centros de estudios eclesiásticos.
Para acabar esta parte más académica se contó con Agustín Bugida Sanz, quien en "Formación y vida litúrgica en los Seminarios", apuntó que una auténtica formación litúrgica requiere no sólo la teoría, sino también la práctica. En cuanto iniciación "mistagógica", se alcanza principalmente por medio de la vida litúrgica de los alumnos, a la cual son conducidos con profundidad creciente a través de las celebraciones litúrgicas comunitarias.
Todo ello vivido en un ambiente de cordialidad y buen ánimo. "Nos ayudó a todo ello las celebraciones litúrgicas", afirma Roberto Gutiérrez.
Se hizo presente durante estas Jornadas, monseñor Julián López, obispo de León, presidente de la Comisión Episcopal de Liturgia y miembro de la Asociación, quien presidió el primer día la Eucaristía.
Las Vísperas del día 1 de septiembre, se celebraron en la Abadía de la Santa Cruz del Valle de los Caídos.
Para concluir la Jornada, contaron con la presidencia de monseñor Juan Antonio Martínez Camino, obispo auxiliar de Madrid y secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española.
Durante estos días, se procedió a la renovación de cargos de la AEPL, siendo la junta de gobierno: presidente: Aurelio García Macías; secretario: Luis García Gutiérrez; tesorero: Emilio Vicente de Paz y vocal de publicaciones: Pedro Manuel Merino Quesada. A todo ellos, los asistentes les agradecieron sus esfuerzos y trabajos.
Para concluir estas Jornadas, la tarde del día 2 de septiembre, realizaron una visita al Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial.