Un documento histórico- indicó el santo padre-- el primero del magisterio pontificio, dedicado enteramente al tema de la mujer” La mujer es mujer y madre. Lo recordó hoy el papa Francisco al recibir el 12 de Octubre en la Sala Clementina a los participantes del seminario de estudio promovido por el Pontificio Consejo de los Laicos, en ocasión de 25 aniversario de la Mulieris dignitatem de Juan Pablo II.
El santo padre reiteró que a través de la maternidad, Dios le confió a la mujer 'el ser humano, en una manera totalmente especial'. Y el hecho que la mujer “concibe, lleva en su vientre y da a luz a los hijos” y esto “no es simplemente un dato biológico, pero comporta una riqueza de implicaciones, sea para la misma mujer, por su modo de ser, por su relaciones, por el modo en el cual se pone delante vida humana y a la vida en general”.
Entretanto el papa puso en guardia delante del riesgo de reducir tal dimensión a un simple 'rol social' y de 'promover una especie de emancipación que al ocupar los espacios sustraídos a los hombres, abandona lo femenino”.
Porque la mujer –indicó Francisco-- conserva “'una sensibilidad particular por las cosas de Dios, especialmente porque nos ayuda a entender la misericordia, la ternura y el amor que Dios tiene por nosotros”. “Yo sufro, y lo digo de verdad, cuando veo en la Iglesia o en algunas organizaciones eclesiales que el rol de servicio de la mujer” se desliza “hacia un rol de servidumbre” indicó el santo padre.
Y también por esto, concluyó “su presencia en la Iglesia tiene que ser valorizada mayormente, evitando en particular de transformar su 'rol de servicio' en una tarea 'servil'”.